En el jardín de la mamma

A veces pensamos que para hacer fotos que nos satisfagan o nos gusten, tenemos que tener delante una gran montaña nevada, una playa tropical, una despampanante modelo o un potente deportivo. Si bajamos la vista hacia nuestros pies podemos llevarnos muchas sorpresas y algunas pueden quedar bonitas en una foto.

Recuerdo que era una tarde lluviosa (raro por estos lares), tenía ganas de hacer fotos y no sabía muy bien a qué...

Cuando ya no llovía demasiado, descubrí que no era el único que tenía ganas de mojarme.

                           

                                               ¡Ya tenía modelo!

Aunque mi madre casi me lo liquida, ¡se le estaba comiendo las plantas!

Tuve que interceder por él y conseguí salvarlo  "in extremis".

Eso sí las condiciones fueron claras: ¡fuera de mis plantas!

Nos trasladamos al suelo.

Como el animalico se lo tomaba con calma, no corría mucho y posaba relajado para mí, intenté sacarlo guapetón...

A la mañana siguiente, con todo mucho más seco y perdida la pista del caracol, tuve que buscar nuevos modelos. Esta vez le tocó a un cactus. Uno muy especial, que tiene estas flores tan espectaculares...

Resulta casi increíble contemplar estas flores tan bonitas a media mañana y observar que al final de la tarde están totalmente marchitas, casi muertas. He preferido traeros aquí la cara hermosa del cuento...

Siempre pensé que un cactus era una planta de "rango menor", tirando a fea. Después de esta lección en el jardín de la mamma los miraré con otros ojos.

Amig@s

      Una celebración, un cumpleaños, amigos...muchos amigos. Al sacar la cámara, reacciones para todos los gustos...hay quien se esconde, quien se gusta, quien al principio no quiere ni que le enfoques  y se va animando después.
       

   








     Hace tiempo que no llevo la cámara a una de estas reuniones. Suele ser fácil encontrar modelos entre tus amigos y las sonrisas están aseguradas. El buen rato también...

 Con suerte, alguien puede verse favorecido tras la foto y se lanza.












 A otros "hay que buscarles el despiste" intentando atrapar ese gesto tan suyo. 
Es fabuloso ver que todos tenemos nuestra belleza y casi nunca el más guapo 
es el más fotogénico, siempre hay personas que le gustan  a tu cámara...

     Otros parece que llevan toda la vida posando, se dan situaciones "especiales" y  hacen que todo sea muy sencillo...

     Pero casi siempre las imágenes van llegando cuando los amigos se van relajando y dejan de ver al fotógrafo y a la cámara.

     Me fascina hacer fotos a mis amigos, es una gozada cuando se ven realmente identificados con lo que tu has capturado.
     El disfrute es enorme cuando alguien te dice, "¡vaaaa, hazme otra!"...




     Yo también quiero otra y otra...si por mi fuese, no pararía.






   ¡¡Gracias por vuestra paciencia!!

Book María Jesús

Os presento a María Jesús, a parte de ser mi amiga, ella siempre tendrá la "dudosa suerte" de ser mi primera modelo oficial. Ambos depositamos mucha ilusión en esta primera experiencia, novedosa para las dos partes. 

Fue una sesión un tanto accidentada. El viento puso todo de su parte para que aquello no tuviese buen final. Pero las ganas de hacer aquellas fotos nos permitieron aguantar hasta bien entrada la noche.

Entre risas, vergüenzas y charlas fueron saliendo algunos retratos...

En aquél momento los dos hicimos lo mejor que sabíamos, uno a cada lado del objetivo.

Lo pasamos muy bien, representó nuestro bautismo en los books fotográficos. Creo que a los dos nos gustaron los resultados.

Al final, todo se complicó un poco más, empezó a llover y llegó el punto final de aquella primera, accidentada y simpática sesión de fotos con modelo.


              ¡Gracias MJ por tu confianza, simpatía y sobre todo...por tu paciencia!

Bodegones

Siempre me ha gustado mantenerme curioso e intentar aprender cosas nuevas. Pocas veces había hecho bodegones. Me siento afortunado por haber recibido lecciones de un gran maestro, Pedro José Fatás Cabeza, virtuoso fotógrafo de la tierra y persona generosa a la hora de ceder su saber. Con él reafirmé que la fotografía es el sitio en el que quiero estar, es lo que quiero hacer.

Nuestro experimentado profesor puso empeño en abrir nuestros ojos a una forma diferente de fotografía,  a la experimentación, a componer escenas con muy pocos medios y mucha imaginación, a captar una luz intensa y maravillosa...

Reflejos, texturas, colores, sombras que nos traen imágenes "glamurosas" o impactantes.









En la enseñanza recibida había más sitio para el ingenio o la creatividad, que charlas sobre cámaras o aparatos, que también las hubo claro...allí descubrí los respaldos digitales, el formato medio y muuchas otras cosas.







Fue un verdadero reto por sacar esa "chispa" que cada uno llevamos dentro, esa mirada a las cosas que nos rodean, la luz que las ilumina y nuestra "visión propia" de todo ello.
           

Intensos momentos que se hicieron muy cortos. Vaya desde aquí mi agradecimiento a Pedro José, por todo lo que me transmitió, por su paciencia, sus consejos y por ser como es.


   ¡Muchas gracias...
...maestro!

Anita y Oscar (boda en Monzón)

Ella es Anita...

              
  





                                                                     







                                                   


                                                 él Oscar...

  Anita y Oscar

Con estas fotos quise plasmar esa decisión de seguir juntos,
para lo bueno...         

          y para lo "no tanto"...
                                           
Haciendo participes a las familias,

y amigos,

con símbolos que anuncian su nuevo estado

el estado de una mujer...




























          y un hombre que se quieren




































        ¡¡Muchas felicidades!!

Sergio y su perro

     Dejé mi coche en el taller, me dijeron que tardarían. Pensé en "matar el rato", ¿unas fotos?. Tenía "el dedo inquieto" y no sabía muy bien a que disparar... "no veía nada". Empecé a pasear...no era el único. El paseo me llevó a un parque, encontré a Sergio, él también paseaba...a su perro.





                                                           Llamó mucho mi atención el animal...

                       Mucho más el cariño del chico hacia el perro...

La confianza entre ambos...







                    La paz que transmitía aquél animal al saberse querido y respetado.




A Sergio le gustó mi cámara y las fotos, a mí su perro...
Creo que los tres pasamos un buen rato.